Trabajar en condiciones de altas temperaturas en regiones como Latinoamérica puede generar riesgos en la salud, así como una disminución en la capacidad y productividad laboral. Entre las actividades afectadas por el estrés térmico, se encuentra la agricultura, la construcción y la recolección de residuos, así como los trabajos realizados con hornos o fundidoras y las petroleras.
Ante esto, se recomienda contar con un plan destinado a prevenir las enfermedades y riesgos relacionados con el calor o frío. Asimismo, se debe informar a los trabajadores sobre los peligros de trabajar en ambientes con condiciones extremas de temperaturas, y entrenarlos para identificar y atender los primeros síntomas de estrés térmico.
El estrés térmico es un malestar corporal provocado por el desajuste en la temperatura, ya sea por la acumulación excesiva de calor o su pérdida, como resultado de las condiciones ambientales, la actividad física efectuada y la ropa utilizada. Aunque no es un efecto patológico, sí es la causa de otros efectos patológicos.
En determinadas situaciones se presenta de forma repentina. Puede reconocerse fácilmente, e identificarlo permite evitar gran parte de los daños que ocasiona. Como es natural, la primera consecuencia del estrés térmico es sentir mucho calor o frío. También se presenta:
El clima y temperaturas en Latinoamérica varían significativamente entre regiones, corriéndose más peligro a la exposición al calor. Además, las zonas tropicales y subtropicales presentan niveles de temperatura que pueden afectar la productividad laboral.
La región posee desiertos, selvas y ambientes de humedad abundante, así como climas que cambian a lo largo del día o permanecen por tiempos prolongados.
Además, debido a la informalidad laboral en la región y los escasos recursos para adaptarse a los crecientes niveles de calor, sufren mayormente el impacto del estrés térmico en la producción laboral. A esto se suman condiciones de trabajo duras, horas prolongadas bajo la luz solar directa, altos niveles de humedad, descansos breves y poco acceso al agua potable.
Para la prevención del estrés térmico por calor, principalmente se recomienda la hidratación constante durante la jornada laboral. Se debe contar con pantallas contra radicación térmica, ropa aislante con superficies reflectantes o ropa enfriada con aire, agua o hielo. Además, es aconsejable:
Para la prevención de estrés térmico por frío, en exteriores, se aconseja:
Si la actividad laboral representa un riesgo de estrés térmico por frío o calor, las empresas deben establecer la peligrosidad de cada situación para aplicar acciones particulares. En primer lugar, el protocolo debe señalar los riesgos de lesiones por contacto con superficies muy frías o calientes, así como un plan de aclimatación preventiva.
Además, debe contar con las medidas básicas que habrán de llevarse a cabo en cada nivel de riesgo. Estas, junto a otras medidas, deben servir para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores, en especial en regiones como Latinoamérica donde es poco probable que se cuente con estos protocolos en la informalidad laboral.
Unir Revista (2020). ¿Sabes qué es el estrés térmico y de qué forma puede afectar en el trabajo? En UNIR analizamos los principales problemas y cómo prevenirlos [página web]. Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (s.f.). Calor y trabajo. Prevención de riesgos laborales debidos al estrés térmico por calor [documento online]. Fundación Estatal para la Prevención de Riesgos Laborales, F.S.P. (2019). Exposición laboral al estrés térmico por calor y sus efectos en la salud. ¿Qué hay que saber? [documento online]. Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional (2013). Prevención de las enfermedades relacionadas con el calor o muerte de trabajadores que se desempeñan al aire libre [página web].
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