Llegó el verano y las picaduras de insectos aumentan en esta estación. La mayoría de ellas son semejantes, pero hay aspectos que las diferencian. En este artículo te queremos ayudar a distinguir las picaduras de los insectos más frecuentes en nuestro país.
Mosquito: son las más frecuentes en los meses de verano. La picadura es única, no dejan hinchazón en la zona. Son muy fáciles de reconocer porque son pequeños bultitos rojos circulares. Otra característica es que suelen picar mucho durante varios días.
Abeja: esta picadura es una de las más dolorosas, aunque el efecto no dura más de dos días. Es importante quitar el aguijón con una pinza para que no se quede dentro.
Avispa: es similar a la anterior en cuanto a lo dolorosa. Aparece una mancha roja con un punto blanco en el medio. En este caso, no hay que quitar el aguijón porque la avispa no se desprende de él.
Hormiga: este insecto muerde. La piel se hincha y puede generar pus. En algunas ocasiones, puede transformarse en ampolla.
Araña: las arañas también muerden. Hay picaduras que pueden ser graves si se trata de una especie peligrosa. Tienen forma de diana y producen mucho picor.
Pulgas: cuando pica este pequeño insecto, que vive de la sangre de los mamíferos, aparecen pequeños hinchazones en la piel. Son picaduras muy numerosas y agrupadas. Están muy juntas unas de otras y suelen producir mucho picor.
Así pues, esperamos que pases un verano libre de picaduras, pero por si acaso con estos brochazos seguro que te será más fácil reconocerlas.
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