A lo largo de la historia el hombre ha inventado diferentes artilugios para recrear el movimiento, como el zoótropo el zoopraxiscopio o, evidentemente, el cine. En el año 1937, Walt Disney empezó a realizar experimentos con la técnica de la rotoscopia para así poder realizar su famosa película animada Blancanieves.
Posteriormente, y cuando la animación en 3D entró en la industria del entretenimiento, se empezaron a desarrollar técnicas para la captura del movimiento humano de una forma más creativa, flexible y con mayor nivel de precisión. Así, en los últimos años se han desarrollado tecnologías, como la captura de movimiento o MoCap, capaz de registrar el movimiento real que realiza una persona y generar una recreación en 3D de dicho movimiento. Esta tecnología ha revolucionado la industria del cine y de los videojuegos, dando un realismo a los personajes virtuales nunca visto hasta el momento.
Y es precisamente esta capacidad de reproducir los movimientos humanos con una elevada precisión la que permite el uso de dichas tecnologías en otros campos, como la medicina deportiva o la Ergonomía.
Si tenemos en cuenta que el principal objetivo de la Ergonomía es "adaptar el trabajo a las capacidades y posibilidades del ser humano" (Asociación Española de Ergonomía), incorporar una tecnología que permita comprender y analizar con precisión el comportamiento musculoesquelético, biomecánico y biométrico de las personas durante la realización de tareas laborales supone, también, una revolución y un avance espectacular.
Quirónprevención, basándose en este tipo de tecnología, y en colaboración con la Universidad de Zaragoza, ha desarrollado el sistema HADA (Herramienta de Análisis y Diseño Asistido), una potente herramienta digital que permite realizar un análisis objetivo y preciso de las exigencias físicas de cualquier puesto de trabajo existente o en fase de diseño, y poder adecuar los requerimientos físicos a las capacidades de sus usuarios.
El sistema HADA, gracias a su portabilidad y a su facilidad de uso, se viene aplicando en sectores y tareas tan variadas como en las cadenas de montaje de empresas automovilísticas, en salas de control de industrias energéticas o en puestos de camareras de piso de cadenas hoteleras. Está compuesto por una serie de sensores inerciales que se colocan al trabajador y un software para la captura y análisis del movimiento. La información proporcionada por los sensores durante la captura en campo, en combinación con un software de animación 3D, permiten reproducir el movimiento del trabajador con un modelo biomecánico, posibilitando llevar a cabo una valoración ergonómica ágil y precisa.
Este tipo de sistema nos permite capturar imágenes 3D en tiempo real del operario (aun sin ser captadas por las cámaras), obteniendo información correspondiente a movimientos articulares (biomecánica), con absoluta exactitud pudiendo realizar simulaciones de posturas y movimientos, análisis de factores clave (aplicación de fuerza, repetitividad, tiempos de exposición, posturas, tiempos de recuperación), evaluaciones específicas de riesgos, e incluso diseños del puesto de trabajo en entornos virtuales.
Por consiguiente, el sistema HADA nos permite a los especialistas en Ergonomía, por primera vez, obtener aquellos datos que siempre hemos necesitado conocer para realizar nuestros cálculos e interpretaciones, pero en este caso con una precisión hasta ahora impensable y, extraer conclusiones e interpretar los resultados en comparación con las herramientas convencionales de captura de información.
El sistema HADA tiene múltiples aplicaciones en diferentes campos, como en el deportivo, en la valoración del daño corporal o en la validación de productos, pero el principal campo de aplicación es la Ergonomía y, en particular, en la prevención de trastornos musculoesqueléticos:
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