Cáncer: preguntas y respuestas #DíaMundialContraElCáncer

Podríamos definirlo como un proceso con formación de nuevas células, malignas, con capacidad de crecimiento rápido, con frecuencia anárquico, localmente y a distancia, es decir, a otros órganos por vía sanguínea o linfática (metástasis).

Con frecuencia en el momento del diagnóstico, el proceso se halla suficientemente extendido, como para dificultar las posibilidades de tratamiento pudiendo llevar a un desenlace fatal.

Se han imputado como causas del cáncer, determinantes genéticos (hereditarios) y ambientales (virus, tóxicos, irritantes, etc.), aunque sigue siendo una incógnita en un buen número de ellos el motivo por el que se inicia el proceso. Por tanto, la carga genética, algunos hábitos de vida y determinadas exposiciones ambientales predisponen a diversos tipos de cáncer.

Así, a modo de ejemplo, es sabida la relación del cáncer de mama con factores genéticos, el de pulmón con el tabaco, el de piel con la exposición al sol, el de próstata con la edad y dieta, el de colon con la dieta escasa en fibra y exceso de proteínas, el de cuello de útero con virus (herpes virus simple tipo II, papilomavirus VPH), el de hígado con el virus de la hepatitis C, el mesotelioma pleural con Amianto, el angiosarcoma hepático con el Cloruro de vinilo monómero, etc.

Por tanto, lo más importante es la DETECCION DE FACTORES DE RIESGO, su PREVENCION y una DETECCIÓN PRECOZ de la enfermedad y la consulta médica ante determinados síntomas, especialmente si existen factores de riesgo, dado que las posibilidades terapéuticas y de curación total son altas en las primeras fases. En los últimos años las técnicas diagnósticas y terapéuticas han avanzado enormemente.

¿Cómo sospecharlo?

Lo recomendable cuando alguien se siente indispuesto es la consulta al médico, dada la necesidad de un diagnóstico precoz, siendo necesaria esa consulta lo antes posible ante determinados síntomas o signos:

• Tos o ronquera persistente.
• Lesiones cutáneas o mucosas de nueva aparición o que han cambiado de aspecto, especialmente si son irregulares, oscuras, pican, o sangran.
• Aparición de tumoraciones (bultos) en cualquier parte del cuerpo que antes no estaban.
• Pérdida de peso, cansancio o pérdida de apetito de forma injustificada.
• Cambio del ritmo intestinal deposicional, o urinario.
• Heridas tórpidas de difícil curación.
• Dificultad en la deglución (disfagia).
• Sangrados o secreciones inusuales.

Estos síntomas no siempre son debidos a cáncer, pero deben obligar a la consulta especializada. El médico indicará las pruebas necesarias para establecer el diagnóstico y que en ocasiones podrán incluir la realización de una "biopsia" que consiste en una punción con extracción de una muestra de tejido del área anormal que será examinada bajo microscopio para identificar la existencia o no de células cancerosas.

¿Qué puedo hacer para prevenirlo?

Llevar una vida sana para evitar los factores de riesgo de padecer un cáncer. Algunas personas son más sensibles que otras a los factores que pueden originarlo. Sobre los factores heredados poco podemos hacer. No todas las personas con un factor de riesgo particular van a padecer la enfermedad.

El Código Europeo contra el Cáncer indica 12 consejos para prevenirlo:

Infografía prevencion cáncer

¿Cómo se trata el cáncer?

Puede tratarse con cirugía, radioterapia (irradiaciones), quimioterapia (fármacos anticancerosos), con hormonas o con terapia biológica. Se utilizará un método o una combinación de ellos en función del tipo de cáncer y su ubicación, de si la enfermedad se ha extendido, de la edad del paciente y la salud en general y de otros factores.

Con un diagnóstico y tratamiento precoz ha aumentado enormemente la supervivencia por cáncer y las posibilidades de curación total en los últimos años.

¿Y el cáncer laboral?

Los cancerígenos son sustancias que causan cáncer y son de diversa naturaleza. Se incluyen agentes químicos, físicos (ej. Radiaciones ionizantes) o biológicos (ej. Virus), si bien más recientemente se han evidenciado agentes como determinados procesos u ocupaciones o incluso cierta organización del trabajo.

Estos agentes cancerígenos laborales están clasificados en base a la evidencia científica sobre sus efectos en seres humanos, por distintos organismos internacionales y nacionales, como la IARC que depende de la OMS, la ACGIH y el NIOSH de los EEUU, o la DFG de Alemana, o en España a través del RD 665/1997 de 12 de mayo sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo según el Reglamento (CE) 1272/2008 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 16 de diciembre de 2008 sobre clasificación, etiquetaje y envasado de sustancias y mezclas (CLP).

El 12 de diciembre de 2017 ha sido publicada la nueva Directiva (UE) 2017/2398 del Parlamento Europeo y del Consejo que modifica la 2004/37/CE relativa a la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes carcinógenos o mutágenos durante el trabajo y los estados miembros deberán poner en vigor las disposiciones legales, reglamentarias y administrativas necesarias para dar cumplimiento a lo establecido en dicha Directiva a más tardar el 17 de enero de 2020 e informarán de ello inmediatamente a la Comisión.

El Instituto Nacional de Seguridad, Salud y Bienestar en el Trabajo (INSSSBT) tiene una base denominada INFOCARQUIM con información sobre las substancias cancerígenas y mutágenas de origen químico según la clasificación CLP.

El Instituto Catalán de Seguridad y Salud Laboral informa en su web sobre los cancerígenos laborales, y determina los más frecuentes entre los trabajadores de Cataluña, lista obtenida con el proyecto CAREX-CAT (CARcinogen EXPosure) que consiste en un sistema de información con estimación del número de trabajadores expuestos a diferentes agentes cancerígenos según los procesos de trabajo y el sector de actividad económica de empresas. Los resultados son parecidos a los de otros países de nuestro entorno. Distribuidos por orden de la prevalencia de trabajadores expuestos:

• Radiación ultravioleta (UV) solar (10,6%).
• Trabajo a turnos (7,8%).
• Humos de motor diésel (3,9%).
• Sílice cristalina (1,9%).
• Radón y sus productos de degradación (1,7%).
• Benceno (1,4%).
• Hidrocarburos aromáticos policíclicos (1,4%).
• Cromo VI y sus compuestos (1,3%).
• Formaldehido (1,0%).
• Níquel y sus compuestos (0,8%).

¿Cómo conocer el riesgo de exposición a agentes cancerígenos laborales?

Según todos los Organismos de referencia en Seguridad y Salud Laboral, la bibliografía y la normativa en prevención de riesgos laborales, la empresa debe, Identificar la presencia de sustancias cancerígenas en el trabajo, evaluar el riesgo y proceder a aplicar las Medidas Preventivas necesarias.

Los técnicos del Servicio de Prevención de riesgos laborales de la empresa realizan un estudio de las condiciones y procedimientos de trabajo para valorar la exposición a sustancias cancerígenas o mutágenas e indicar al empresario, las medidas preventivas necesarias para evitar la exposición. Para ello tienen en cuenta las cantidades utilizadas, vías de exposición, frecuencia y duración de la exposición, las condiciones de uso y las formas de presentación, teniendo en cuenta la existencia de personas especialmente sensibles, embarazadas o en período de lactancia. También se tendrán en cuenta trabajadores multiexpuestos.

Existen Valores límites de exposición a agentes químicos del INSSSBT, pero para las sustancias cancerígenas y mutágenas no hay una dosis para la cual no exista riesgo. No existe una dosis segura. La gravedad del efecto no depende de la dosis.

¿Cómo prevenir la exposición a agentes cancerígenos laborales?

La primera medida sería la eliminación y sustitución del agente o proceso que origine el producto cancerígeno. La Evaluación de riesgos indicará las medidas específicas, siguiendo un orden de priorización consistente en eliminar, sustituir, estanqueidad del proceso, protección colectiva, protección individual, y otras medidas que reduzcan la exposición.

Estas medidas preventivas son tanto de índole técnico como medidas generales y organizativas que son múltiples y variadas. Las medidas preventivas sobre el trabajador serán: Formación e Información, Equipos de Protección Individual (EPIs) adecuados según el agente, proceso y lugar de trabajo y la Vigilancia de la Salud individual y colectiva.

¿Cómo debe ser la Vigilancia de la Salud de los trabajadores?

Los empresarios están obligados a garantizar una vigilancia de la salud de los trabajadores, que tiene que ser adecuada y específica, en relación con los riesgos para exposición a agentes cancerígenos y mutágenos, según lo indicado en el Artículo 22 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales 31/1995 (LPRL), el apartado 3 del artículo 37 del RD 39/1997 Reglamento de los Servicios de Prevención (RSP), el artículo 6 del RD 374/2001 sobre protección de la salud y seguridad de los trabajadores expuestos a agentes químicos y del RD 843/2011, de criterios básicos para desarrollar la actividad sanitaria de los servicios de prevención, y efectuado por los especialistas en Medicina del trabajo de los Servicios de prevención.

Esta Vigilancia de la salud deberá ser ofrecida por el empresario a sus trabajadores, antes del inicio de la actividad con exposición a agentes cancerígenos o mutágenos, sea por nueva incorporación o cambio de lugar de trabajo, a intervalos regulares con una periodicidad de acuerdo con los conocimientos médicos actuales, protocolos de vigilancia sanitaria y normativa específica, y todos los trabajadores con exposición similar, cuando en algún caso se haya detectado un trastorno de salud que pueda ser debido a la exposición a alguno de estos agentes. También se ofrecerá a los trabajadores que se reincorporen al trabajo tras una ausencia prolongada por motivos de salud, para detectar una posible relación con la exposición y para recomendar medidas preventivas y de protección adecuadas.

Deberán tenerse en cuenta los trabajadores especialmente sensibles a los riesgos, así como a trabajadoras embarazadas, lactantes o a los menores.

Los empresarios deberán revisar la evaluación de riesgos y las medidas de prevención y protección colectivas e individuales cuando se hayan detectado daños a la salud que puedan ser debidos a la exposición a agentes cancerígenos y mutágenos, o cuando los resultados de la vigilancia de la salud pongan de manifiesto una insuficiencia o inadecuación de estas medidas.

La Vigilancia de salud colectiva con criterios epidemiológicos, adquiere una gran importancia en la exposición a cancerígenos, dado que el tiempo de latencia, es decir, período desde el inicio de la exposición a un cancerígeno y la detección clínica de los cánceres resultantes, suele ser largo, lo que dificulta establecer la causa-efecto.

¿Cuál ha sido el número de partes comunicados de enfermedades profesionales por agentes cancerígenos en el período Enero-Diciembre 2017 en España?

Los partes de enfermedad profesional, son registrados en el CEPROSS, el Observatorio de Enfermedades Profesionales (CEPROSS) y de Enfermedades causadas o agravadas por el trabajo (PANOTRASTSS), de la Secretaría de estado de la Seguridad Social.

En referencia al número de partes comunicados, distribuidos por grupos de enfermedad y agente causante Enero-Diciembre 2017, para el grupo 6. Enfermedades profesionales causadas por agentes carcinógenos, han sido:

• Amianto (34)
• Cromo VI y compuestos de cromo VI (6)
• Hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH), productos de destilación del carbón: hollín, alquitrán, brea, antraceno, aceites minerales, parafina bruta y a los compuestos, productos, residuos de estas sustancias y a otros factores carcinógenos (3)
• Níquel y compuestos de níquel (3)
• Polvo de madera dura (2)
• Radiación ionizante (2)
• Aminas aromáticas (1)
• Arsénico y sus compuestos (1)
• Benceno (1)

Conclusión:

Lo más importante es la DETECCIÓN DE LOS FACTORES DE RIESGO, su PREVENCIÓN y una DETECCIÓN PRECOZ de la enfermedad.