Las mujeres con sobrepeso tienen más probabilidad de tener covid persistente

Son dos factores de riesgo independientes, según confirma un nuevo estudio sobre unos 1.500 pacientes que tuvieron covid.

Entre los factores que mejor predicen quién va a desarrollar covid persistente están ser mujer y tener un índice de masa corporal (IMC) elevado, según confirma una investigación que se ha realizado en cerca de 1.500 pacientes diagnosticados por covid.

El estudio, publicado en PLOS Global Public Health, concluye que por cada 1 kg/m2 más de IMC hay un 3% más riesgo del trastorno.

"Esos dos factores tienen un valor predictor significativo en el empleo de asistencia sanitaria entre los diagnosticados por covid persistente", apuntan los autores de la investigación, una de las más amplias realizadas hasta ahora en Reino Unido.

Este estudio corrobora hallazgos similares, donde también se apunta al sexo femenino y a la obesidad como elementos favorecedores de un retardo en la recuperación de esta enfermedad, así como de su persistencia.

Recientemente, en The Lancet Respiratory Medicine, y coincidiendo con el Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas, un grupo de científicos del Centro de Investigación Biomédica de Leicester (Reino Unido), expuso en su estudio que las mujeres tenían un 32% menos de probabilidades de recuperarse tras la infección por SARS-CoV-2; presentar obesidad también dificultó volver al estado físico y mental previo a la infección.

Ahora, con este nuevo trabajo, los investigadores, también de Reino Unido, concluyen que ambos factores son importantes rasgos predictivos de covid persistente.

Los síntomas más prevalentes asociados a esta condición en este estudio han sido ansiedad (32%); dolor e incomodidad generales (28%); fatiga (25%); insomnio (22%) y alteración cognitiva (20%). Los autores del trabajo recuerdan que otros estudios sobre covid persistente, sus manifestaciones más comunes fueron: fatiga; dolor de cabeza; desorden de atención; pérdida de cabello, y disnea.

El autor principal del trabajo, Vassilios Vassiliou, de la Universidad de Anglia Oriental, en Norwich, declara que "la covid persistente es una afección compleja que se desarrolla durante o después de tener covid, y se clasifica como tal cuando los síntomas continúan durante más de 12 semanas. Se cree que poco más de dos millones de personas en el Reino Unido lo sufren y afecta a las personas de diferentes maneras".

Junto a los síntomas ya mencionados, también puede aparecer con dolor u opresión en el pecho; confusión mental; mareos; dolor en las articulaciones, depresión; acúfenos; pérdida de apetito, y cambios en el sentido del olfato o del gusto.

Para este estudio, el equipo encuestó a pacientes en Norfolk que habían tenido un diagnóstico de covid confirmado por PCR positiva en 2020, antes de que se pusieran en marcha las campañas de vacunación. En total, incluyeron a 1.487 personas, de los que más de la mitad 774 experimentaron al menos un síntoma de covid persistente.

Tras analizar factores como IMC, sexo, uso de medicamentos, otras complicaciones y habitar un área desfavorecida, encontraron como principales factores de riesgo ser mujer y la obesidad.

"También descubrimos que las personas con covid persistente tenían tres veces más probabilidades de usar los servicios de atención médica que las que no mostraban síntomas de covid persistente", expone Vassiliou.

Prácticamente desde el inicio de la pandemia se hizo evidente que el exceso de kilos resultaba un agravante en la covid-19. Tales indicios se confirmaron en estudios más amplios, que llegaron más adelante. Uno de los más relevantes ha sido el efectuado por la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) que, tras analizar trece grupos de comorbilidades distintas establecidos en pacientes ingresados en el hospital por el coronavirus, mostraron que la obesidad, junto con las enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas fueron las más influyentes en un peor pronóstico de los pacientes.

A diferencia de lo que se está viendo con la covid persistente, en la fase aguda de la enfermedad, el sexo masculino predominaba en todos los grupos de mal pronóstico identificados en este estudio llevado a cabo con el del Registro clínico SEMI-COVID-19 de la SEMI.

A juicio de los investigadores esto podría deberse a diferentes mecanismos como la relación ACE/ACE2 y la regulación en hombres de la proteasa transmembrana serina 2.